¡LA VIDA es una mierda!

No habla el frustrado, tampoco el depresivo.
Ese fue el grito de Arquímedes, la verdadera intuición, ¡LA VIDA es una mierda! ¡Nos vamos a morir! El que intuya esto será casi espacio y tiempo, será casi simultaneidad, casi libertad.




jueves, 26 de febrero de 2009

Llorar, reir, hablar, pensar

Que misterio el lenguaje y que misterio tiene el lenguaje. Acá van algunos pensamientos sueltos.


En un post pasado escribí algo sobre las diferencias entre algunas lenguas y lo que, a mi modo de ver o entender, que esto permite; potencialidad de "libertad" del pensamiento frente al término, posibilidad de síntesis o riqueza descriptiva.

"Tampoco las propias ideas se pueden reproducir del todo mediante palabras" dice Nietzche. Para el Castellano esta frase es inentendible, un pensamiento imposible.

"Mucho me temo que los animales contemplan al hombre como un ser de su mismo tipo que, de modo sumamente peligroso, ha perdido el sano sentido común de los animales: lo contemplan como el animal loco, el animal que ríe, el animal que llora, el animal infeliz", también del capo. La clave, me parece, en este pensamiento es "ríe y llora", el resto es un jucio de valor (si) o, en todo caso, una reivindicación de lo "más" instintivo y autoconservador. El hombre (animal humano) ríe y llora, los demás no: La conciencia, entendida como forma final y posible de la inteligencia, surge del interjuego entre el instinto de la risa, el reflejo del llanto y la capacidad de emitir mensajes sonoros.
La secuencia del título es también la secuencia temporal.

3 comentarios:

Pupila dijo...

Sí que es misterioso el lenguaje. Eso que decía Nietzche de lo indecible también lo reafirman ahora los filósofos posmodernos. Y a veces hasta uno lo siente. Me pregunto si eso facilita o empeora la "comunicación" entre personas de distinta lengua.
Sabes Tanque, a veces siento que los otros animales ríen y lloran, sobre todo los perros; pareciera que tuvieran ciertos efectos fisiológicos iguales a nosotros cuando están alegres o tristes. A veces realmente creo que no son delirios.

Besos.

El tanque dijo...

A mi, hispanoparlante, me cuesta pensar en lo indecible (salvo ciertas sensaciones o intuiciones). Estoy obsesionado con el idioma alemán...

Pupila dijo...

jaja, Ay Tanque ¡me gustó esa manera de confesar!
Tienes razón, el alemán es fascinante, además necesario para entender la Historia; lo intuí algún día, al saber que "gewalt" significa violencia y "Staatsgewalt" significa: poder del Estado.
Es decir que la violencia del Estado está implícita y legítima en la Historia del Derecho!.
Uno podría volverse loco al saber estas "nimiedades".

¡Besos Tanque!