Dialéctica del capital y el trabajo en el power point

Estoy sentado en un anfiteatro con una luz muy tenue y en un asiento muy cómodo, el profesor "explica" durante una hora lo que se proyecta en una pantalla; me duermo.

Quitémosle a esto la oscuridad y la comodidad del asiento, y mantengamos al profesor y su power point; no me duermo, pero me cuelgo y no registro nada.

Recuerdo mis primeros años en la facultad, los exámenes escritos siempre eran unas preguntas en las que te pedían que explicaras x tema, luego, como si de una epidemia se tratara, los exámenes se transformaron en los famosos de opciones múltiples.

Voy a ir más atrás en el tiempo, el secundario. Una de las cosas que me acuerdo era cuando te decían que había que aprender tomar nota.

Esto lo voy a escribir porque ya voy por la cuarta vez que al decir que con el power point no registrás nada no falta el idiota postmoderno que te dice: "depende de quien te dé la clase, hay buenos y malos profesores". Y cuento hasta 10 mientras cierro los puños y respiro profundo, y estando al borde de fajar a mi interlocutor le digo: "Estoy hablando del power point". A lo que el miope de turno me rebate: "Claro, yo también". Entonces le digo: "Vos no, si me escucharas te darías cuenta, no tiene sentido que me hables de profesores buenos y malos, yo me refiero al power point, e todo caso, el profesor bueno con y sin power point". Y me responde: "claro, pero depende, a veces sirve mucho el power point... (y me doy media vueta y me voy pensando en que la revolución es imposible y en que se vayan todos a la reconcha de su abuela).

Bueno, a ver gastón, la cosa viene torcida. El trabajo y el capital, lo subjetivo aplicado a la transformación de lo objetivo. Pero cuando el obrero es un simple apéndice de la máquina y lo creativo se decide en otro lugar surge la lógica del capital. Esa de las opciones múltiples (vean la peli Recursos Humanos, en la parte que van a encuestar a los obreros con preguntas abiertas y lo que le dice el dueño o jefe, no meacuerdo su cargo, le dice que haga preguntas para marcar la repuesta entre opciones) que hace "pensar" según lo preestablecido en las opciones, una especie de cohartamiento de la subjetividad, una especie de "pensar dentro del marco". ¡Lo mismo ocurre con las clases con power point! El docente va hablando según la diapositiva que se está proyectando, ¡esa es la lógica! y no me rompan las pelotas.

Lo lindo de esto es el arte que permite: como no se puede, o no se podrá salir de esta moda, habría que preparar una clase y hablar diciendo "como vemos acá, etc," y que la diapositiva diga cualquier otra cosa, supongamos "ingredientes para cocinar Torteleti para cuatro, media cucharada de manteca, etc." jajajaja, o en pose de solemnidad de escribano al hablar de la reproducción de los corales poner una verga proyectada, jajajajaja.

jajajajaja.