¡LA VIDA es una mierda!

No habla el frustrado, tampoco el depresivo.
Ese fue el grito de Arquímedes, la verdadera intuición, ¡LA VIDA es una mierda! ¡Nos vamos a morir! El que intuya esto será casi espacio y tiempo, será casi simultaneidad, casi libertad.




viernes, 4 de abril de 2008

Arte y moralidad, Guillermo "Habacuc" Vargas

Hace un tiempo leí en un blog un post sobre un artista costarricense y la polémica que despertó su "performance". Esta consistía en atar un perro hambriento y debilitado a una soga a la pared y dejarlo que se muera de hambre, con un cartel enfrente que decía "eres lo que lees", este texto estaba hecho con comida de perro. La idea del artista era dejar que se muera de inanición frente a la pasividad de los espectadores.
Acá el video




Espectacular, ¿no?
Veamos nuestra sociedad.
Les comento que intenté encontrar el comunicado oficial de la directora de la galería donde se hizo esta bienal, la galería Codice, y no lo encontré. El nombre de la directora es "Juanita Bermúdez" (en teoría), y es muy conocida en la web por sus declaraciones, en realidad, por los que se oponen. Esto es lo que encontré que ella dijo (supuestamente). Después, sin querer, encontré esto (supongo que es joda).

Suponiendo que todo este delirio es verdad, doy mi opinión.
Opinión mía: me parece una genialidad de Habacuc y una patología mental la sociedad.

Les dejo unos interrogantes:
1) ¿Qué es el arte? ¿Debe ser moralmente aceptable?
2) ¿Qué significa el boicot, síntoma de qué es?

7 comentarios:

Novia de América dijo...

si entendemos por genio alguien que transgrede y da que hablar, ese Habacuc podría ser un genio.

No creo que el arte deba ser moralmente aceptable. Qué es arte y qué no, no se si podría decírtelo. Todo podría serlo...

El tanque dijo...

Es que la reacción de los buenos me enerva. ¡Como si la comida para perros fuese comida para perros! "Somos lo que comemos" jajajaja, es una genialidad.
El perro "natividad" se moría de hambre en la calle a la vista de todos los buenos, pero si se hace en el nombre del arte jode.
Y la falta de freno en los maralistas, ser moralista es por definición indignarse y enceguecerse, sin intentar dudar un poquito de la información que te dan, y así funciona todo. ¡Descartes ha muerto!

nanolefou dijo...

Me parece que la crítica no tiene que ver con el hecho artístico en si, que me parece muy bueno, sino con el hecho de la falta de compasión. Ver morir un perro en la calle es perdonable para nosotros, porque son cosas que consideramos inevitable y a las que estamos acostumbrados. NUESTRA PASIVIDAD ES PERDONABLE. No es perdonable haber tomado acciones para que un perro muriera de hambre ( si es que murió) Digo además que ningún perro muere de hambre en la ciudad, salvo que un canalla, de buen tino para el arte y la transgresión, lo ate y le impida acceder a la comida. No seria dejarlo morir, creo que seria matarlo.
Con respecto a la declaración de los derechos del animal, mas allá de que todos la violamos, es cierta y su vigencia crece constantemente en estos días. Podemos discutir algún día discutir si es una tontería o no. En todo caso nos llevará a discutir el lugar y el rol del hombre en el universo y ante la naturaleza. Y ya dejará de ser una bravata de moralistas.

Saludos Tank

El tanque dijo...

Nadie duda un poquito antes de horrorizarse. No pude encontrar nada oficial (digamos) sobre este suceso, todos artículos de blogs y cadenas de mails en los cuales se dicen lo que se puede leer. También muchos videos en youtube. Y las imágenes son siempre las mismas, como una especie de "spam" moral.
Pero supongamos que fue real (tal como lo dicen) y que él quería que el perro se muera en esas condiciones, o matarlo de esa manera, siéndole imposible alcanzar la comida económica para mascotas. Supongamos eso. ¿Qué diríamos? a Automáticamente expresaríamos que es un hijo de puta, seguramente. ¿Asunto cerrado? ¿Boicot y se acabó? ¿La discusión se termina en lo moral?
Vayamos un paso más por favor, voy un paso más (ya que no lo quiere dar ninguno). Como nadie (o casi nadie) come carne humana pensemos lo siguiente. Ahora el ser vivo que ata es un pibe, o un adulto desnutrido, debilitado y abandonado por la sociedad, mostrándole una lata industrial de comida para humanos, y lo presenta como hecho artístico. No sólo diríamos que es un hijo de puta, sino que además va preso, o lo matamos. Las mismas preguntas que con el supuesto del perro.

¿Pensamos la primer pregunta del post "Qué es el arte"? ¿Todavía no?

Sigamos suponiendo entonces. ¿Y si lo hizo con un sentido transformador? Miles de personas mueren de hambre, y supongo que muchos animales enfermos y abandonados también (y si no es así, supongámoslo entonces) ante nuestra "pasividad perdonable"; entonces recién al ver atado y muriendo a un animal o a un humano estaríamos obligados a actuar.
Si el arte es política, y (sigamos suponiendo, porque todo esto es bravata moralista) lo hizo con un sentido de despertar el sentimiento cristiano de compasión frente a animales enfermos y abandonados (como dice el artículo 6), y apoyándonos en el lema de que "el fin justifica los medios", no podríamos suponer que la muerte de este perro en esas condiciones justifica el empezar a actuar sobre los muchos otros animales(y los humanos). Podría ser, ¿o no? Sino dónde ponemos a nuestro ideal de hombre, tendríamos que boicotear al Che y a toda posibilidad de transformación real.

Que quede claro, si yo veo una "performance" como esta, lo suelto al perro y los cago a todos a trompadas (espectadores y organizadores, incluído el de limpieza y el sereno). Y después de matarlo a piñas a Habacuc le agradezco (como a Heiddeger, Borges, Nietzche, y tantos otros) por hacer algo para cambiar la realidad. Cambiar no, transformar (Si es que frenamos un poco con la bravata moralista y paramos la pelota un segundo).
Si les interesa (si no les interesa dejo definitivamente la costumbre de comer asado, y eso saben que ¡me haría muy mal!) saltemos todas las suposiciones y su moralina para pensar qué carajo es el arte, o qué cosas son el arte.
Yo tiro una primera opinión cortita y al pie, y, siguiendo a la novia de américa digo, que el arte es casi todo lo que hacemos, no hay separación entre arte, trabajo y política. ¿Ustedes qué piensan?

Pupila dijo...

Hola Tanke. No sé muy bien cómo llegué aquí, lo que sé es que fue viendo y leyendo cosas sobre el asunto de Habacuc.
Yo estoy totalmente de acuerdo contigo y ya lo dije en otros 2 comentarios sobre el asunto. Y aquí lo vuelvo a decir, agregándole algunos detalles.

Creo que el sentido de crear arte es decir algo, y no precisamente más-de-lo-mismo. El sentido del arte definitivamente no debe ser moralista pues para eso están otros medios. Con esto no quiero justificar al Habacuc que ni conozco, sólo que con su exposición de arte contemporáneo (porque el arte contemporáneo es eso, transgredir las fronteras del arte tradicional) creo que el tipo demostró la hipocresía del ser humano y de nuestras sociedades.

Seguro que muchos presentes en la galería al igual que muchos que firmaron en su contra, estuvieron horrorizados con el asunto, veían al animal que les producía mera lástima pero no hicieron nada contra eso cuando debieron. Quiero decir, que una de las premisas del arte contemporáneo (así como de la calle y la vida) es permitir la interacción del público dentro de las obras..se espera nuestra acción.
El arte contemporáneo es la vida misma. Ya no se trata de una obra museística.
¿Por qué ningún hipócrita de esos horrorizados -conociendo o no esa premisa- hizo nada por el animal? Claro, porque es más fácil criticar y señalar al otro que muestra realidades, que actuar por el que lo necesita.. y eso mismo pasa en nuestras sociedades.
¿Por qué nadie cortó esas delgadas cuerditas o dio de comer al perro? pura y asquerosa lástima. No es suficiente. Eso que pasó con los espectadores también pasa con los organismos privados y públicos de TODAS LAS SOCIEDADES en supuesta defensa de los derechos humanos u otros seres vivos, incluyendo las grandes corporaciones y los medios de comunicación.
Puro Bla Bla y nadie actúa, me parece que eso era lo que quería demostrar el autor y simplemente lo logró.
Sin embargo, yo estaría de acuerdo si esa fuera la intención. Lo que si no entiendo es la relación del caso de los Rotweilers, quizá la intención de la obra no tenga nada que ver con ese caso, quizá sólo fue rememorar y ponerle un nombre al perro; porque creo que la intención estuvo clara y es obvia: “ERES LO QUE LEES”: ERES LA PERRARINA, PERO ERES EGOÍSTA, NO HACES NADA PARA DARTE POR EL OTRO. SÓLO TE QUEDAS ALLÍ, INACCESIBLE, VIENDO Y CRITICANDO.

También es obvio que la intención de esos videos/contra es dar lástima, el mismo tratamiento amarillista que vemos a diario en la TV. Esa música de lágrimas artificiales que inevitablemente toca a cualquiera, mostrando imágenes con el mensaje "pobre perrito" pero descontextualizadas de la real intención del autor.

Lo que creo que con esta cachetada nos dicen: NO SEAS COMO ESOS ESPECTADORES CONMOCIONADOS QUE OBSERVAN, LEEN, CRITICAN Y NUNCA HACEN NADA, NINGUNA ACCIÓN REAL. NO SEAMOS COMO LA PERRARINA QUE NUNCA SE LE DIO AL PERRO HAMBRIENTO.

El tanque dijo...

No había pensado en la posibilidad darle de comer al perro, en tanto que obra de arte contemporánea. Hoy justamente hablábamos con una migo, y me decía algo parecido, cómo nadie hizo nada, nadie cortó esas soguitas finitas con las que estaba atado. Mi amigo dice que es por el RESPETO exagerado que se le tiene a lo que sea obra de arte. Puede ser, y lo que decís vos también.
Me gustó mucho tu visión, sobre todo eso de no seamos como la perrarina que nunca se le dio al perro hambriento. Yo lo había interpretado como que el alimento estaba dirigido al perro, como forma sádica y cuyo mensaje estaba dirigido al animal. Pero leyendo lo que decís me convence tu interpretación, el lenguaje escrito es para humanos, y quienes estaba en ese "aquí y ahora" propio de el arte en escena fueron la perrarina que nunca se le dio al perro. ¡Impresionante!

Novia de América dijo...

qué buenas estas discusiones... muy cierto lo de cortar las cuerditas (pasividad más que respeto por la obra yo creo... quizás algo de impotencia). Pero más cierto es que nadie pensó en el perro afuera pero sí se conmovió adentro. Así es nuestro mundo. Y menos mal que ató a un perro...