¡LA VIDA es una mierda!

No habla el frustrado, tampoco el depresivo.
Ese fue el grito de Arquímedes, la verdadera intuición, ¡LA VIDA es una mierda! ¡Nos vamos a morir! El que intuya esto será casi espacio y tiempo, será casi simultaneidad, casi libertad.




domingo, 27 de abril de 2008

Moolaadé o los Derechos Humanos

He visto una película que nunca le recomendaría verla a un enemigo, pero definitivamente se la aconsejo a mis amigos. Moolaadé es imprescindible.
Confieso que sabía de antemano que la temática versaba sobre la ablación genital de las mujeres en cierto país africano de religión musulmana, lo cual me generaba cierta "sospecha" de que la "mano" venía por los derechos humanos occidentales y todas esas opresiones de los dueños del mundo, nosotros. He tenido discusiones acerca de estos temas en varias ocasiones y me resisto al discurso de los derechos humanos inalienables, aunque también me enoja tener que argumentar utilizando el término "cultural" y nada más. Es más fácil defender las corridas de toros que estos asuntos, en donde uno puede sentirse un total idiota al terminar de pronunciar la palabrita "cultural".
La película es perfecta (salvo por los pajaritos de ambiente que se notan agregados y resultan molestísimos), Arranca con un personaje llamado "el mercenario", un comerciante que trae mercancías de Francia y de Africa. Este personaje somos nosotros, occidente, traemos pilas paras las radios, traemos la conciencia. Somos el enemigo del poder masculino de la tribu. Esta función del mercenario la cuestiono, la libertad de expresión como concientizadora, la rebelión europea en Africa no me cabe. Pero tampoco todo el director es tan ingenuo, nadie en esta cinta es totalmente polar en su moralidad, tal vez Hitler era un cariñoso amante. El mercenario es mezquino y avaro. Pero claramente representa un peligro para los hombres, sus pilas y su labia son su armas.
Moolaadé significa algo así como asilo para quienes lo solicitan, pero en versión Africana, es decir, hay pimienta y especias de magia, o al revés, hay carne de magia y hechicería. No es tan sencillo, quien decreta el Moolaadé debe ser quien pronuncie las palabras para que se vaya, si se viola el moolaadé pueden ocurrir adversidades en la comunidad. Esta vez le solicitan asilo a la segunda esposa una niñas a las que les van a amputar el clítoris, y ella instala el moolaadé.
No les voy a seguir contando la historia, quiero que la miren, pero sí doy mi opinión ante un tema tan polémico. He oído muchas voces del feminismo postularse en contra de estas prácticas, arcaicas y machistas dicen, lo cual no niego (como tampoco niego que el feminismo es una filosofía un poco escasa). No podemos ser la obra de Habacuc, ni tampoco vivir para el consumo y nada más, sin importarnos nada. Solamente podemos opinar sin indignarnos, filosofar. Estoy totalmente de acuerdo con la medida tomada para con el mercenario, y estoy totalmente de acuerdo con el wassa wassa del final, los oprimidos dicen basta.

Descárguenla del Emule, viene con subtítulos en español, el identificador del archivo es F1D9D1754932244C020F2235DD317F2F (la extensión es "avi" y ocupa 699,66 MB)


Ah!!!! me olvidaba. A esta película le doy.....4 tanquetas

Moolaadé:
"Una película que nadie puede dejar de ver" (Juan carlos gómez, clarín)
"Sin duda de lo mejor de los últimos años" (Thierry Gasquet, le monde diplomatique)
"La combinación perfecta entre arte y política" (Juan Carlos Pelotudo, página 12)
"Un largometraje muy duro pero con un final muy majo" (Manolo González Gansález, El país)
"Faltaron las bombas" (Kaixo Arruabarrena, Berria Euskal)
"Africa le hace corte de manga a Occidente" (el tanque, Vademecum-vadetecum)

6 comentarios:

Pupila dijo...

Que fuerte y cruel. Me gustaría verla. Por cierto, no imagino la vida de una mujer sin clítoris, que terrible.. (Formulado así, parece un comentario banal ¿no?, pero el clítoris aún en estos tiempos y espacios se subestima y si no se amputa, pues no se conoce como se debería conocer y esa es otra manera de oprimir o asesinar a una mujer en algún momento determinado. Analogía fuerte, ¿no? parece fácil de re-conocer pero no es tan simple. Es todo un mundo de abstractas sutilezas. Toda una heroicidad.)

El tanque dijo...

Interesante lo que decís y como lo decís. El clítoris no existe en el lenguaje cotidiano, no tiene "apodos" o nombres sustitutos como los tienen los demás. El clítoris no existe en la charla, en el doble sentido (aún siendo esto por tabú), está amputado socialmente, como decís vos.

Pupila dijo...

Cierto. Y no sólo en las charlas, que sería lo de menos (o lo de más, viéndolo desde el punto de vista educativo e iniciático jaja), pero se subestima mucho en las relaciones de pareja entre hombre y mujer (imagino que por eso hay cada vez más relaciones entre mujeres), el clítoris es algo meta-físico pienso (y sigo con lo meta), por eso digo que es todo un universo de sutilezas, no se trata de un método pragmático de obrar en un momento determinado, son muchas cosas las que influyen. Toda una galaxia elástica. Ese conocimiento -que además es muy subjetivo en cada mujer- es toda una hermosa proeza viril.

El tanque dijo...

Es verdad, las charlas son menos importantes, en este caso, que lo concreto. ¡Pero que significativo su ausencia discursiva eufemística! Con todo lo idiota que tiene nombrar con nombres alusivos, el clítoris es ignorado totalmente, como si no interesara a quienes forman (¿formamos?) las palabras. Los pícaros y las pícaras hablan de concha, poronga, pija, raja, verga, empanada, huevos, gomas, toronja, lolas y nunca aparece la metáfora del clítoris. Sólo es científico y "serio". Sólo es clítoris, a diferencia de pene, testículos, mamas y vagina, siempre presentes en el discurso cotidiano sexual. Es como si ni siquiera fuese tabú, como si no existiese.

Pupila dijo...

jajaja, cierto, ni siquiera tabú, como si no existiese, tal cual. En ese sentido de conversa social si que es prácticamente algo nulo.
También pudiera decir que quizás ha sido nuestra culpa -de las mujeres-, parte de la cultura machista y todo ese bla bla.. pero creo hay algo que va más allá. Y ese más allá es que el clítoris tiene algo de misterioso, quizás que en cada mujer es estimulado de manera distinta. Por eso te digo que no se trata sólo de algo concreto, también influyen otras cosas. Es un descubrimiento bonito pienso, ir descubriendo a la mujer. El clítoris no es un accesorio para satisfacer el acto sexual, es lo principal para satisfacer a una mujer en el acto sexual. Y ahí está el detalle, que no es un "botón agregado" como generalmente se cree, es todo un dios del ritual sexual. Es algo muy delicado en mi opinión, porque a pesar de pasa por un proceso de erección como el pene, pues no se compara en suavidad.
Eso que dices de que no existe, quizás también es culpa de la industria pornográfica" que erróneamente se cree que educa a los hombres pero no hay nada más falso que eso (bueno me fui por la tangente ya.. es un tema muy amplio y complejo creo..)

El tanque dijo...

Lo que decís, de que no se trata de algo concreto, abre las puertas a la interacción, la comunicación verdadera, el polo opuesto a la técnica, el polo opuesto al bailarín.