¡LA VIDA es una mierda!

No habla el frustrado, tampoco el depresivo.
Ese fue el grito de Arquímedes, la verdadera intuición, ¡LA VIDA es una mierda! ¡Nos vamos a morir! El que intuya esto será casi espacio y tiempo, será casi simultaneidad, casi libertad.




jueves, 29 de noviembre de 2007

Resonancia Magnética Social sobre obesos y homosexuales. Contracara de la visibilidad.

¿Qué tienen en común los gordos que piden la ley sobre trastornos alimentarios y los homosexuales que hacen las marchas del orgullo gay? El hecho de ser una enfermedad!

Esta pausa es sumamente necesaria, un respiro. Y de paso quiero comentar una cosa. ¿Saben cómo iba a ser este post? Se iba a llamar "el anzuelo" o algo por el estilo. Iba a ser una breve reflexión incompleta y sin completar por unos días. Pero me di cuenta que no era necesario la confirmación de ustedes a través de un comentario, porque, además de que nadie comenta, no me interesa, porque ya sé lo que están pensando!
Ehhh! Bajá un cambio man, no me bardiés. Que cosa esa costumbre de salir enérgicamente con el catálogo del infractor, a modo de zorro de tránsito tocándome el pito al cometer una supuesta infracción en los códigos de convivencia ciudadana. No me refiero ni a enfermedad individual, ni física ni mental. Pero voy a aprovechar esta costumbre generalizada para hacerte ver lo que mi resonador ve. Lo primero que debe llamarte la atención es el hecho de no haber opuesto resistencia a pensar en que al decir "la enfermedad" me estaba refiriendo negativamente a los homosexuales. Y mas aún. También voy a resaltarte el hecho de no haber opuesto ni la mas mínima fuerza a pensar que los obesos son enfermos. He aquí la cultura puesta entre vos y yo! Una microesfera del mundo en que estamos y hacia el cual irremediablemente nos conducen con la contracara. Debo decir que me veo tentado a concluir el post acá, amo el malentendido y la polémica de tapón de punta. Pero voy a seguir.
La enfermedad a la que me refiero es a la de tipo social. Pero esto queda en pausa para retomarlo es unos párrafos, cuando el proceso intuitivo lo dictamine.
Vamos a remontarnos a un tiempo previo (sin ningún rigor histórico) para ver cómo estaban relacionadas estas dos cualidades, voy a denominar como me salga, porque el hecho de buscar palabras no "ofensivas" me pone nervioso y me saca del foco (igual no estoy de acuerdo con eso de la ofensa a través de las palabras denominadoras, otra forma de enfermedad democrática). En ese tiempo en el que pido que no centremos, sin duda alguna, ser gordo y ser trolo era motivo se segregación, de estigmatización. Era necesario ocultarse, o sentir verguenza (hablo de generalidades, seguramente esto es variable según el temperamento de cada individuo). O sea que tenemos la segregación y la señalización con el dedo índice por el resto de la sociedad,y la sombra individual, el esconderse del estigmatizado. ¿Y qué tenemos hoy!? Una enfermedad que pide ser enfermedad para dejar de serlo por un lado, y una sanidad que pide más visibilidad para generalizarlo (esto último puede sonar confuso, pero piensen en cómo son esas marchas del orgullo gay, la estética y disposición. Fijense que no son marchas de protesta, atenti.). Obesidad y homosexualidad. Reversión y profundización. Tenemos los obesos que luchan-mostrándose por ser reconocidos como enfermos y quieren dejar de ser lo que son (obesos), y tenemos homosexuales que quieren no ser vistos como enfermos y se muestran como el futuro. Ni una ni la otra, una mierda a toda esta pelotudez! Mierda a los gordos enfermos y mierda a los maracas del orgullo gay! Ehh, la plancha referí! Que costumbre esa de salir con los tapones de punta cada vez que alguien dice lo que está fuera del progresismo. Debe llamarnos la atención, que antes eran motivo de ocultamiento y segregación, y que hoy sean visualización y aniquilación por un lado (obesos) , y visualización y futurización por otro (gays). Es muy raro, no? Si hay visualización debe llamarnos lo atención! Pero encarguémonos de cada uno por separado sin antes olfatear a qué viene todo esto. La enfermedad, se acuerdan? Saco la pausa.
¿Cuál es esta enfermedad social? La de vivir cada vez mas asfixiada, previsible y descomplejizadamente a nivel social (a nivel personal, no lo veo tan claro. Será motivo de otro post). Esto es todo un conjunto, en unos años surgirá el concepto que los englobe; asfixia, y previsibilidad por un lado y el proceso de descomplejización por otro, y todos juntos en esto que no puedo denominar son la enfermedad.
Obesos. La obesidad se define por el índice de masa corporal (hoy) mayor a 30(es la división entre el peso y la altura al cuadrado). Pero no seamos ingenuos y no caigamos en estas falacias matemáticas que tiñen de axiomático a cualquier cosa a las que se le apliquen. La obesidad, la gordura el sobrepeso, o el término que quieran existen previamente a éste índice. Y existen como el cabello rubio, castaño y los ojos verdes o marrones. Con la diferencia que ese rasgo se genera con la ingesta (shh! Algunos tienen mayor facilidad (no quiero usar predisposición) para subir de peso, y qué? También es una característica personal, la película de la foto si querés). Pero he aquí la cuestión fundamental, la injerencia de la voluntad en la gestación de la gordura. La descomplejización pasa por la cuestión del fenotipo normal, y solamente es normal aquel en que tenga injerencia el "alma" del sujeto, sólo ahí se plantea la normalidad, nadie diría hoy que lo normal es tener ojos verdes o cabello negro. Pero donde la subjetividad participe hay posibilidad de normalización mediante patologización. Y es asfixia y previsibilidad porque es un error, un problema, es una enfermedad que hasta ellos mismos piden y se quieren adjudicar, ellos gritan "mirennos la grasa, es un factor de riesgo" (me podrán decir que sólo lo hacen por un beneficio económico o es movilizado por la industria farmacológica para vender más medicamentos, rajá de acá materialista histórico descomplejizante!) . La asfixia y previsibilidad radica en el NO PUEDE SER.
Homosexuales. La prueba sería decir delante de cualquier representante cultural del progresismo en la televisión (los representantes de hacia dónde va la nueva tiranía de la mayoría), Wainrach (o como se escriba) o Magdalena Ruiz Guiñazú, " los trolos son enfermos mentales, perversos desviados". "Eso es homofóbico" te van a decir. Y eso sólo te van a decir, lo cual es muy llamativo, un fiel ejemplo del zorro de tránsito que toca el pito ante la infracción social. Evidentemente no es considerado patología por la sociedad ni por los homosexuales (dejemos de lado a los del contrato de vasallaje contemporáneos). Pero esto tanto no me importa, no tiene nada consigo, y está bien que así sea, pero para lo que intento decir no son mas que nueces vacías. Lo que si es muy interesante es la estética (aclaro que siempre me estoy refiriendo a los homosexuales de las marchas del orgullo gay) y el paraíso social sexual que prometen, que sin saberlo es una descomplejización y previsibilidad sexual. Una sexualidad animal, una no-sexualidad. Acá necesito hacer un paréntesis que creo va a ser largo, así que salto de párrafo, hago unas explicaciones y retomo esto.
Unas líneas acerca de la sexualidad que obviamente son muy discutibles, pero me animo a decir que esto es así y no hay otra. Acerca de la sexualidad quiero decir que solamente es humana (no hablo de sexos, ni de reproducción sexual, hablo de sexualidad). Y necesariamente la sexualidad implica sensualidad, implica deseo, más allá de que implique placer (si así fuese sólo habría masturbación, o no habría tanta insistencia en el otro). Creo que el placer no es tan constitutivo de la sexualidad como el componente del deseo. Acá hago otra salvedad. El deseo es variadísimo en su objeto, a cada uno le gustan cosas distintas y lo que quieras, pero si o si hay una cuota de dificultad en el otro como denominador común del deseo. Para que haya deseo tiene que haber alguna especie de prohibición. El poder sensual de lo prohibido es insuperable en cuanto a generación de deseo y placer. Si la sociedad fuese sexualmente liberal, totalmente liberal no habría deseo, no habría sexualidad. Esto llevenlo a muchos años de instalado gente, al principio todos van a decir "queremos una sociedad sexualmente liberal", pero imaginen esto llevado a su extremo, eso es lo que digo. No existiría la fantasía, las palpitaciones ni el temor, sería una sociedad sin sexualidad. Serían una marcha del orgullo gay. Aterricé.
Un homosexual necesita no ser segregado, no necesita la marcha del orgullo gay. Es más, sospecho que deben tener mucho mas deseo si son señalados que si no, toda su sexualidad es prohibida, a diferencia del pata de lana o el que está enamorado de la mujer más prohibida. Esas manifestaciones, con sus viejos progres que las merodean que salen en la tele hablando del destape sexual son un proceso muy social. Que llamativamente es opuesto al de la obesidad, tanto en los externos (digamos el resto de la sociedad) como en los que lo son (dogores y maracaibos, jajaj, es joda).
La sociedad que sin darnos cuenta construimos día a día es abstracta, carente de cualidades verdaderas, en la cual toda la sociedad toca el pito ante la infracción generando cada vez menos infracciones, mayor previsibilidad y asfixia social, y esto con sus mecanismos de descomplejización que acabo de relatar (y muchísimos mas, por supuesto). La sociedad que se gesta, una sociedad de mierda, una sociedad sin magia, una sociedad de distintos-iguales, una sociedad sin aventura, la sociedad matemática.

1 comentario:

Anónimo dijo...

buuuuu
la homosexualidad no es una enfermedad!!!!!!!!!!
que mala informacion con razon nadien comenta!!!!