¡LA VIDA es una mierda!

No habla el frustrado, tampoco el depresivo.
Ese fue el grito de Arquímedes, la verdadera intuición, ¡LA VIDA es una mierda! ¡Nos vamos a morir! El que intuya esto será casi espacio y tiempo, será casi simultaneidad, casi libertad.




jueves, 15 de mayo de 2008

"Lo que se viene son los alimentos", efecto Sarampión o criticismo

Seguramente, en épocas de disputa entre "el campo" y el gobierno, habrán escuchado esta frase, que agrega luego (siempre y automáticamente), "hay que apostar al campo" ("no a la industria", dice entrelíneas), en boca de periodistas, dirigentes políticos, y referentes de todo tipo. Es el efecto sarampión típico de una sociedad acrítica y estupidizada por estancos modelos de vida. Me podrán argumentar los licenciados en comercio exterior, los analistas de relaciones internacionales y los popes de las ciencias económicas, que esto realmente es así. ¡Pues háganlo bien, porque no les será tan fácil convencerme!
Hagamos un poco de crítica, lancemos unos interrogantes:
¿Quién dice esto? Quiero decir, ¿Desde dónde se emite este discurso, desde qué tipo de división internacional del trabajo se pone en circulación? ¿Lo emite (seguramente) aquel capaz de emitir discursos a escala internacional (ni yo, ni vos, ni Horacio López, ni ningún insignificante Americano; tiene más chances un empresario Angloamericano o de cualquier otro país dominante) que no es egoísta y quiere sacrificar sus beneficios en pos de una humanidad de abundancia?
¿Cuál es el fenómeno que impulsaría esta futura escasez de alimentos, esta hambruna que pronostican (y que tanta sospecha me genera, ¡como hoy por hoy no hubiera hambruna!)? ¿Una gran gula mundial, un deseo irrefrenable de ingerirlo todo, una apertura de los consulados de los Estados Unidos de Angloamérica para la tramitación de ciudadanía y la adopción del estilo de vida yanki que hará al mundo morfar "rosquillas" como loco? Porque digamos que si van a escasear será por dos causas, o por falta de producción (y lo que implica esto) o por aumento de demanda (sea para ingerirlos de entrada como lo exportamos nosotros, o para manufacturarlos e ingerirlos ya en un paquete. ¡Pero siempre para ingerirlos!) ¿O será que los pobrecitos países industrializados que no tienen recursos naturales, y que ruegan al cielo cambiar toda su industria por una buena pampa húmeda, seguirá manteniendo su estructura productiva sobre nuestra materia prima? ¿O hay un plan yanki de instalación de la hamburguesa en China, que va a hacer que semejante población esté necesitada de carne y más carne, y más carne...?
Muchachos, paremos con el Sarampión y dejemos de repetir cual loro lo que dice cualquier farabute con acceso mediático. No se trata de "apostar" (palabra que subliminalmente induce a pensar en una economía rebelde, autónoma e ingobernable. Palabra que está muy emparentada a la visión de la economía como la administración de recursos escasos(de lo que ya está) sin pensar en la producción para la administración), hay que planificar, tanto para el sector agropecuario, como para el desarrollo de una industria de alta complejidad. PLANIFICAR un país para su real liberación. (y no toda esta paparruchada simbólica Kirchnerista) (Ni la paparruchada siempre moralista de la oposición de turno).

1 comentario:

GUIA POCKETBLOG dijo...

Totalmente de Acuerdo!!

Planificacion es la palabra clave.

Muy bueno el video que recomendaste.

te mando un abrazo y estamos en contacto!!

Slds, Pablo.